abril 12, 2006


EL OMBLIGO Y LA INSEGURIDAD

En estos dos últimos días el problema de la inseguridad está muy presente en todos los catrielenses debido a los dos asaltos muy violentos que sufrieron la propietaria de un kiosco céntrico y el propietario de una casa de repuestos. Es evidente que el tema preocupa y aparece en la población la idea de quién será el próximo o la próxima.
Por el momento no hay novedades positivas en la investigación. No puedo abrir juicio sobre la policía porque desconozco si tienen los medios necesarios y el personal necesario o bien la falta de efectividad se debe a la impericia.
Lo que es cierto que ahora desde las instituciones municipales están trabajando, aunque como siempre, es necesario que haya dos internados para empezar. Veremos qué se logra.
Alguna vez hablamos del déficit de Catriel con respecto a las instituciones intermedias, verdadero termómetro de una comunidad participativa. Esas instituciones literalmente no existen o son dos o tres de escasa relevancia. Es ahora donde los comerciantes por ejemplo necesitan de una Cámara de Comercio fuerte para exigir a los poderes pertinentes mayores medidas de seguridad y prevención; sin embargo la Cámara de Comercio es un fantasma del que sólo queda una edificio que lentamente se está destruyendo. Ahora es cuando la unión hace la fuerza, y la unión no está. Demasiado preocupados los comerciantes de Catriel por mirarse su propio ombligo no pudieron mantener una institución que les hubiese sido muy útil en casos como éstos y en otros.
Pero quizás esto de mirarse el propio ombligo no sea propiedad exclusiva de los comerciantes, sino de la comunidad toda, lo que es más grave aún.

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